¿Qué son las Hemorroides?

Las hemorroides son conocidas como almorranas, las cuales son venas hinchadas que se localizan en el ano y la parte inferior del recto. Aparentemente son similares a las venas varicosas. 

Podemos diferenciar dos tipos de hemorroides: las que se desarrollan dentro del recto (hemorroides internas) o las que se producen debajo de la piel alrededor del ano (hemorroides externas). 

Es muy frecuente en las personas adultas padecer alguna vez, hemorroides. 

¿Cuáles son los síntomas?

Los signos y síntomas de las hemorroides dependen del tipo de hemorroide. 

A continuación, vamos a proporcionarte toda la información que te será de gran utilidad, para diferenciar entre los distintos tipos de hemorroides. 

Hemorroides externas: 

Este tipo de hemorroides se ubican debajo de la piel que rodea el ano. Los signos y síntomas de este tipo de hemorroides, son los siguientes: 

• Irritación en la zona del ano 
• Dolor o molestia 
• Inflamación alrededor del ano 
• Sangrado 

Hemorroides internas: 

Este tipo de hemorroides se encuentran en el interior del recto, no se pueden sentir y en raras ocasiones pueden causar molestias. 

El esfuerzo y la irritación al defecar puede causar los siguientes síntomas: 

• Sangrado indoloro durante las deposiciones. Puedes notar pequeñas cantidades de sangre en el papel higiénico o en el inodoro. 
• Una hemorroide puede sobresalir por la abertura anal, ocasionando una hemorroide prolapsada o protuberante, que ocasiona dolor e irritación. 

Hemorroides trombosadas: 

En estos casos la sangre se acumula en una hemorroide externa y se genera un coágulo o trombo, ocasionando la siguiente sintomatología: 

• Dolor intenso 
• Inflamación 
• Bulto duro cercano al ano. 

¿Cuándo debo ir al médico?

En el caso que observes que al ir al baño, tus deposiciones tienen restos de sangre o tienes dolor en la zona del ano o hemorroides y éstas no mejoran después de una semana del cuidado en tu domicilio, debes consultar con tu médico. 

En el caso que tengas cambios en los hábitos intestinales u observes que las heces cambian de color y consistencia. 

El sangrado rectal puede deberse a otras enfermedades como: cáncer colorrectal y cáncer anal. 

Debes acudir al médico si tienes grandes cantidades de sangrado rectal, si padeces de aturdimiento, mareos o vértigo. 

¿Cuáles son las causas de las hemorroides?

Las venas alrededor del ano se estiran debido a la presión y en algunas ocasiones pueden sobresalir o inflamarse. 

Las hemorroides se pueden desarrollar por el aumento de la presión en el inferior del recto. Las causas más frecuentes que ocasionan las hemorroides, son las siguientes: 

• Esfuerzo al evacuar
• Sentarse durante largos periodos en el inodoro
• Sierra crónica o estreñimiento
• Obesidad 
• Embarazo 
• Relaciones sexuales anales 
• Tener una dieta con bajo contenido en fibra 
• Levantar cosas pesadas con regularidad

¿Cuáles son los factores de riesgo?

A medida que envejecemos, el riesgo de padecer hemorroides es más elevado, esto se debe a que los tejidos que sostienen las venas en el recto y en el ano, se debilitan y se estiran. Esto ocurre con mucha frecuencia durante el embarazo, debido a que el peso del bebé ejerce presión sobre la zona anal. 

¿Qué complicaciones pueden tener?

Las complicaciones que pueden causar las hemorroides pueden ser las siguientes: 

• Anemia: en pocas ocasiones, la pérdida de sangre en las heces puede ocasionar anemia. 
• Hemorroides estrangulada: en este caso se interrumpe el suministro de sangre a una hemorroide interna, esto puede producir un dolor muy intenso. 
• Coágulo sanguíneo: puede formarse un coágulo en una hemorroide, conocido como hemorroide trombosada. Esto no es peligroso, pero puede ocasionar un dolor muy intenso y en algunas ocasiones requiere que el especialista de la salud la drene.  

¿Cómo prevenir su aparición?

Para prevenir las hemorroides es importante mantener las deposiciones blandas y evitar el estreñimiento, para evitar realizar demasiado fuerza y presión y que pasen fácilmente. 

A continuación, te proporcionaremos toda la información necesaria para prevenir la aparición de las hemorroides. 

• Introduce en tu dieta alimentos ricos en fibra: añade más verduras, frutas y cereales integrales. Tus heces serán más blandas y aumentarán su volumen, esto te ayudará a evitar el esfuerzo que puede causar hemorroides. 
• Bebe abundante líquido: bebe entre 6 y 8 vasos de agua y otros líquidos para mantener tus deposiciones blandas.
• No realices esfuerzos: contener la respiración mientras evacuamos, genera una presión en las venas de la parte inferior del recto. 
• Ve al baño cuando tengas ganas: en el caso que aguantes las ganas de ir al baño, el impulso desaparece y la materia fecal puede secarse, por lo que defecar se puede volver más complejo. 
• Haz ejercicio regularmente: para evitar el estreñimiento, debes realizar ejercicio de forma periódica. El ejercicio puede ayudarte a perder el exceso de peso. 
• Evita estar sentado durante largos periodos de tiempo: estar sentado durante mucho tiempo, puede aumentar la presión en las venas del ano. 

¿Cómo evitar el diagnóstico?

Para diagnosticar las hemorroides externas, el especialista de la salud puede evaluarlas mediante un exámen clínico. 

No obstante, en el caso de las hemorroides internas, el médico deberá realizar un examen rectal.

• Examen digital: el médico inserta un dedo enguantado en el recto. El profesional intentará detectar alteraciones o protuberancias. 
• Inspección visual: las hemorroides internas generalmente son muy blandas, por lo que en ocasiones no se detectan fácilmente mediante un examen rectal. Por lo que es posible que el médico decida realizar un estudio mediante un anoscopio, proctoscopio o sigmoidoscopia. 

En otras ocasiones el médico puede examinarse mediante una colonoscopia en los siguientes casos: 

• Signos y síntomas que pueden indicar que padeces otra enfermedad en el sistema digestivo. 
• Factores de riesgo de cáncer colorrectal. 
• Mediana edad 

Tratamiento casero

Puedes aliviar el dolor leve, la inflamación de las hemorroides mediante tratamientos caseros: 

• Añadir alimentos ricos en fibra en tu dieta: come más fruta, verdura y cereales integrales. 
• Usa tratamientos tópicos: aplica cremas para hemorroides que puedas conseguir en la farmacia. 
• Toma analgésicos por vía oral: consume paracetamol, aspirinas o ibuprofeno siempre bajo la supervisión médica. 
• Realiza baños con agua tibia, sumerge la zona anal en agua tibia durante 10 o 15 minutos, 2 o 3 veces al día. 

Con estos tratamientos, los síntomas de las hemorroides desaparecen en unos 7 o 10 días. 

En el caso que pasados estos días, sigas teniendo dolor y molestias, acude a tu médico y explicale tu caso.